Opinión de
carlos guacollantes
en 28/10/2016
por supuesto que trataré de mantener la tranquilidad y sobre todo la educación hasta donde el daño o perjuicio que me han causado ciertos seudo-profesionales de este consorcio. Me siento ofendido, maltratado, insultado, y un largo etc. resulta que en el mes de junio, si junio ingresé mi carpeta solicitando el levantamiento de la prenda de mi vehículo, documentación con la cual estaría en condiciones de cobrar la liquidación de mi auto en la aseguradora luego de que se declarara "pérdida total". cuando fuí a Carapungo, una señorita nos informó que ese trámite demoraría un mes y medio, cosa que me pareció una eternidad, por obvias razones. con el propósito de que se acelere el trámite, la misma señorita nos sugirió que vayamos directamente a la matriz, esto es en la parada del trole de la Y. ahí es cuando empieza nuestro calvario, para nuestra mala suerte nuestro trámite fue a parar en manos de incompetentes e irresponsables por decir lo menos, puesto que para tratar de resumir a inicio del mes de octubre de 2016, luego de que habían jugado con nosotros engañándonos que nuestro tramite estaba en proceso, la señora Ana Lozano nos informa muy deportivamente que nuestro trámite no se había movido para nada, pues, mi carpeta se había refundido en algun lado y que recién el día anterior (inicio de octubre) la habían encontrado y entonces recién iba a empezar nuestro trámite. pero por si fuera poco nos han tenido engañándonos al indicarnos que nuestro trámite por fin estaría en una determinada fecha (15 dias laborables), sin embargo al acudir el día 14 a recordarles que el día 15 estaremos a retirar el documento tan esperado, con el más frío descaro se nos dice que no nos dijeron 15, sino 20 días. con esto, me parece que estas señoras o están taradas o simplemente son unas irrespetuosas, que no tienen la más mínima idea de como se debe tratar a un cliente y han procedido a tratarnos como si se tratara de un enemigo. debo manifestar además que jamás les quedé mal en los pagos, por el contrario, siempre estuve adelantado en ellos y ni siquiera por esa consideración han sido capaces de demostrar respeto hacia nosotros (mi familia), mientras tanto hemos tenido que afrontar momentos difíciles, pues, al no poder contar con el dinero de la liquidación, hemos debido entrar en gastos y en apuros que estas irresponsables, irrespetuosas y mediocres empleadas nos han provocado "gracias" a su incompetencia, y quiero estar convencido de que se trata de incompetencia porque sería el colmo que todo esto haya sido con alguna dedicatoria, aunque nunca he dado ningún motivo para aquello. en conclusión una vez que reciba mi documento Coneca habrá muerto para mí.